«primera Fila», Mejor Que «front Row» Fundéurae

Es verdad que un desfile es una gran operación de márketing, diseñada con mimo por profesionales. El equipo de Protocolo debe recibir, en nombre del anfitrión, con el mismo cariño y atención a cualquier asistente, lo vayamos a ubicar en primera fila o en Siberia. Pero en un desfile hay que hacer genuinas filigranas protocolarias para ubicar a los ayudantes, y ¡mucho ojo con juntar a leonas con gacelas! Aquí es donde la pirámide de poder se destapa por completo, sin disimulos. El premio gordo es la primera fila (si no quieres parecer una outsider debes llamarlo front row, o “frow” y entonces ahora lo petas). Un desfile en plena semana de la tendencia se encuentra dentro de las convidaciones más apetecibles del circuito social y no recibirla puede ofrecer al garete con amistades de años, negocios e inclusive coaliciones políticas.

Se sentaron junto al viejo diseñador de la firma, Valentino Garavani, su socio Giancarlo Giacometti y la modelo Natalia Vodianova . En Saint Laurent hubo un «pot-pourrit» entre gente de la política, y de la industria de la tendencia. En un cosmos paralelo, el éxito de un desfile se mide por el peso de la primera fila.

Elizabeth Hurley o Demi Moore fueron ciertas asistentes a la ansiada primera fila de la cita más importante de la moda italiana. No posee, naturalmente, el Protocolo la contestación para todos los males de los hechos. El 080 tiene como uno de sus objetivos impulsar la formación en moda y diseño. En Londres todo debe emular ser alterno, punk, moderno, underground. La consigna es atestar los desfiles de gente con el pelo enredado, tatuajes y el lápiz de ojos corrido. En la Mercedes Benz Fashion Week se concentran las princesas judías de Manhattan que nos divierten, sobre todo por su modo de vida ocioso y su sólida cuenta corriente.

Pero claro, el aforo es con limite y hay que priorizar invitando a esas personas que ayuden a proyectar la imagen de marca que el diseñador quiere mostrar. Ellos, y algún compromiso ineludible van a recibir la codiciada convidación. Que va a haber enfados entre esos que se quedan fuera de la lista de oro es mucho más visible que el escote de una Kardashian pero, como en la selva, solo los más fuertes sobreviven. Muy parecida es la visión de Elena Martín, directora creativa de Martin Lamothe. También cree que en los desfiles debe tener presencia “todo el mundo que ame la marca” y sin restricciones.

De De Qué Forma El \’front Row\’ Es El Nuevo Territorio De \’influencers\’ Y Estrellas De Internet

Nos preocupamos de que por lo menos un representante acreditado de cada medio tenga su sitio en la primera fila”, concluye. Todos han visto su nombre en ciertos asientos reservados de los desfiles mucho más relevantes de la semana de la moda parisina. Este frow es el hábitat natural de actrices a la caza de su próximo modelazo de Oscar, estrellas de la música a las que el diseñador desea identificar con su marca, it girls de todo el mundo o aun la mismísima reina de Inglaterra.

row es la primera fila en un desfile

Para resumir, el universo de musas del diseñador se sitúa en lo prominente de la cadena alimenticia. La primera semana de la tendencia siempre y en todo momento consigue congregar a los populares de mayor caché, las primeras estrellas de Hollywood, los vocalistas que venden mucho más discos. En Londres todo debe emular ser alternativo, punk, moderno, underground. La consigna es ocupar los desfiles de gente con el pelo enredado, tatuajes y el lapicero de ojos corrido. Si además de esto tu padre es una vieja gloria del rock & roll, el puesto en primera fila es tuyo.

En El Final Y De Pie

Pero qué poco me imaginaba yo que aquel trabajo soñado iba a estar a punto de transformarse en pesadilla y que, para salvaje, la cadena alimentaria de los invitados a un desfile. En Trendencias | Los diez mejores looks de la semana de la tendencia de Londres. La ciudad más importante de la moda sorprendió a fines de enero, en el contexto de la Semana de la Alta Costura, proponiendo por primera vez un desfile único a estudiantes de moda. Dior fue la firma responsable de abrir la haute couture de Raf Simons a aprendices de las dieciséis escuelas de diseño mucho más prestigiosas del mundo. Aparentemente en otros lados sí se apuesta por los jóvenes talentos. Una vez en la facultad pensó que se le abrirían mucho más puertas, pero no fue de esta forma.

row es la primera fila en un desfile

Carmen Lomana, Helen Lindes, Nieves Álvarez, Boris Izaguirre, Santi Millán o Fiona Ferrer son varios de los nombres populares que se dejaron ver en alguno de los recientes acontecimientos. El quién está y el por qué es dependiente de cada diseñador y así lo asegura Leonor Pérez Pita, mucho más conocida como Cuca Solana, directiva del certamen de La capital de españa. “Nosotros solo gestionamos la asistencia de medios y bloggers y la mitad del aforo en la pasarela lo dejamos en manos de cada diseñador. De esta forma permitimos que sea este quien decida qué personas le resulta interesante tener en su front-row”, apunta Pérez para LaVanguardia.com.

La última información en moda, hermosura, actualidad y el poder femenino. Es verdad que un desfile es una enorme operación de márketing, desarrollada con mimo por expertos. Además es un gran evento, y ahí nosotros contamos bastante que decir. En la Mercedes Benz Fashion Week se concentran las princesas judías de Manhattan que nos entretienen, más que nada por su modo de vida ocioso y su sólida cuenta bancaria. Hablamos de ricas herederas cuyas fortunas proceden del petróleo, las finanzas de Wall Street o las considerables cadenas hoteleras.

Por esta razón, los RRPP de las firmas les han adjudicado un espacio favorecido , que a veces está prácticamente por delante de exactamente la misma Anna Wintour . Tiende a ser caminando de la pasarela, a fin de que no se pierdan ni un detalle y casi puedan tocar la ropa. Si pensabas que la «Frow» (un palabro que junta Front y Row, primera fila en inglés) era lo máximo a eso que se podía aspirar a la hora de sentarse a comprender un desfile, te confundes. Si pensabas que la «Frow» (un palabro que junta Front y Row, primera fila en inglés) era lo máximo a lo que se podía aspirar a la hora de sentarse a ver un desfile, te confundes. Ya hace unas temporadas existe un nuevo «seating» que se ha convertido poco a poco en el más deseado.

Conque, en el otro frow nos vamos a encontrar a las directivas de las revistas de tendencia, tras ellas van las directivas de tendencia, redactoras jefe, redactoras… Y, en cualquier desfile que se precie, no nos tenemos la posibilidad de olvidar del cosmos prensa. Naturalmente, a la prensa convocada para contemplar el desfile hay que tratarla lo mejor posible, situarla en una zona donde pueda trabajar de forma cómoda, con buen tiro de cámara, enchufes, etc…

El equipo de Protocolo debe recibir, en nombre del anfitrión, con exactamente el mismo cariño y atención a cualquier asistente, lo hayamos ido a advertir en primera fila o en Siberia. Pero, aparte de la prensa convocada, está la prensa convidada, que tiene su modus operandi. Lo curioso es que nació de una necesidad que tenían los blogueros como Scott Schuman del blog The Sartorialist en el momento de contemplar los desfiles. Los bloggers de «streetstyle», técnicamente no están acreditados como fotógrafos de pasarela y no se ponen con los fotógrafos especialistas a pie de la pasarela. Se sientan junto a las estilistas, cronistas, clientas etcétera, a cada lado de la pasarela. Este frow es el hábitat natural de actrices a la caza de su próximo modelazo de Oscar, estrellas de la música a las que el diseñador desea identificar con su marca, it girls de todo el mundo o aun la mismísima reina de Inglaterra.